A medida que pasan las décadas y la tecnología se vuelve cada vez más cotidiana, no es de extrañar que el aprendizaje en el campo de la informática se vuelva cada vez más precoz. Incluso, en la actualidad muchos expertos aseguran que a partir de los tres años de vida de un ser humano es el mejor momento para comenzar a andar el camino del conocimiento en este ámbito, debido a que en definitiva los más pequeños tienen mayores probabilidades cognoscitivas de incorporar nuevos conocimientos con mayor facilidad.
Claro que para que nuestros hijos puedan comenzar a dar sus primeros pasos en la computación y la informática es necesario que dispongan de una PC, y por lo general los adultos nos rehusamos a que los más pequeños de la familia hagan desastres en el equipo del hogar, ya que seguramente también solemos utilizarlo para realizar algunas tareas laborales.
Pero lo cierto es que no debemos demorarnos en que se inicien en el apasionante mundo de la informática, por lo que siempre podemos recurrir a dar vida nuevamente a aquella vieja computadora que por obsoleta un día almacenamos en algún rincón del cuarto de trastos.
Ahora bien, uno de los puntos fundamentales en ese momento será decidir cuál es el sistema operativo que nos conviene instalar, para lo cual aquí te ofrecemos una serie de comparaciones entre Windows y Linux para que puedas decidir cuál es el más conveniente para tus hijos.
Sin ponernos en la posición de defender a ultranza las ventajas que puede llegar a presentar Linux en contraposición con Windows, lo cierto es que por muchas razones consideramos que alguna de las distribuciones disponibles de Linux son realmente mucho más convenientes que el sistema operativo de Microsoft.
En principio, si lo que vamos a hacer es volver a la vida a una vieja y obsoleta computadora, que en definitiva es lo mejor que podemos hacer para poner en manos de nuestros hijos pequeños que recién comienzan, seguramente notaremos que al instalar Windows, aún aunque se trate de su vieja versión XP, el equipo reportará algunos inconvenientes, responderá de manera lenta, e incluso en poco tiempo nos veremos en la necesidad de formatear el disco y volver a instalar el sistema operativo desde cero.
Esto se debe principalmente a los recursos que requiere Windows para funcionar. Por ello, una excelente opción es intentar con la instalación de alguna distribución liviana de Linux, que en definitiva nos ofrecerá las mismas herramientas, pero sobretodo porque nos brindará la posibilidad de volver a la vida a aquella vieja computadora.
Otro de los puntos en los que Linux aparece como ganador en la batalla es con respecto a los virus y programas maliciosos. Tengamos en cuenta que ya sea por inexperiencia o falta de control, los niños son más propensos a abrir e instalar aplicaciones que almacenan en su interior malware, ya que lo cierto es que no podemos estar todo el tiempo sobre ellos para controlar qué es lo que instalan en la PC, o si abren archivos adjuntos infectados.
Claro que siempre podemos instalar Windows y añadirle algún antivirus y antispyware potentes, pero lo cierto es que este tipo de programa hace más lentos a los equipos, sobre todo si se trata de equipos viejos y obsoletos. Además puede suceder que el antivirus no haya sido actualizado correctamente, por lo que corremos el riesgo que la PC se infecte con un nuevo malware.
Si lo que deseamos es no correr ese riesgo, la mejor alternativa es optar por Linux, ya que con ello la preocupación en torno a los virus se desvanece.
Asimismo, en Linux la seguridad es más controlable, ya que podemos optar por no darle a nuestros hijos la contraseña de “root” para realizar cambios estructurales en el equipo, con lo que evitamos que el pequeño pueda realizar acciones que perjudiquen el funcionamiento del sistema operativo.
A diferencia de Windows, que permite un filtrado un tanto superficial, Linux brinda la posibilidad de que podamos controlar desde el comienzo el contenido al cual nuestro hijo podrá acceder, sin la necesidad de instalar software dedicados a dicha tarea, lo que hace que Linux se convierta en un entorno informático seguro para nuestros hijos.
Por otro lado, hablábamos más arriba de darle a nuestro hijo una PC vieja y obsoleta, pero también puede ser el caso que deseemos regalarle una netbook, uno de los equipos ideales para los más pequeños.
En este sentido, si bien Windows puede correr en una netbook con características básicas, lo cierto es que Linux es el sistema operativo ideal para este tipo de equipos, e incluso existen distribuciones pensadas para netbooks.
Con Linux, sin lugar a dudas, el rendimiento de la netbook será realmente superior, además de poder instalar todas las aplicaciones que creamos le serán necesarias a nuestro hijo, sin que ello perjudique la performance de la portátil.
Otro de los aspectos que demuestran que Linux es el sistema operativo más adecuado para los chicos que comienzan a dar sus primeros pasos en la informática reside en las grandes oportunidades de aprendizaje que brinda la plataforma, sobre todo por tratarse de un sistema de código abierto. En definitiva, cuando un niño se encuentra expuesto a un sistema operativo y a un conjunto de software de código abierto, las posibilidades educativas se vuelven ilimitadas.
Además, otra gran ventaja de esta plataforma reside en que por lo general la mayoría de los niños suele tener una curva de aprendizaje realmente rápida, adaptándose velozmente a cualquier cambio.
Muchos creen que los niños que utilizan Linux en sus casas presentan dificultades en la escuela en el momento de enfrentarse a Windows, pero lo cierto es que los más pequeños poseen una mentalidad tan ágil que pueden sin inconvenientes adaptarse a distintos entornos. Es lo mismo que sucede con los idiomas, al respecto de lo cual está confirmado que mientras que un niño pequeño puede aprender a hablar y escribir en cuatro idiomas a la vez, a un adulto promedio no se le puede exigir que aprenda simultáneamente más de dos idiomas.
En definitiva, si Windows es tan fácil de usar como suelen señalarlo sus desarrolladores, lo cierto es que los niños que utilizan Linux no deberían tener absolutamente ningún problema con Windows. De hecho, en realidad aumenta la capacidad del pequeño para comprender el rol del sistema operativo y cómo funciona la PC.
Cabe mencionar además que en la actualidad en el mundo Linux es posible hallar herramientas específicas para cada una de las etapas del niño. Incluso existen distribuciones y programas que fueron diseñados específicamente para niños de diferentes edades.
Por ejemplo, y entre otras propuestas, para niños de 5 a 12 años se encuentra disponible la distribución Sugar, que puede ser descargada desde este enlace; para niños y jóvenes de entre 3 a 18 encontramos Edubuntu, disponible en este enlace; para niños de 2 a 15 años se recomienda LinuxKidX, disponible aquí; y Foresight Kids para niños de 3 a 12 años, en este enlace.
Por último, y no menos importante, otra de las ventajas de Linux sobre Windows es su gratuidad, ya que al ser una plataforma de distribución gratuita se evitan los costos de licencia, que en el caso de Windows son lo suficientemente costosos como para hacernos renunciar a la compra y optar por la piratería.
¿Qué opinas al respecto? ¿Consideras que Linux podría ser una buena opción para que tus hijos se inicien en el mundo de la informática? ¿Qué sistema operativo crees que es la mejor opción para los niños? Comparte con nosotros tu experiencia y opinión.
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